La vigilancia estrecha, entre otras cosas, es para detectar aquellos aneurismas que pueden presentar un crecimiento acelerado del saco (>1 cm en un año), aunque falta información rigurosa que soporte la intervención en este contexto.
Los puntos clínicos claves para el manejo de aneurismas de aorta abdominal en 2021 serían:
• Factores de riesgo como edad avanzada, sexo masculino, historia familiar, tabaquismo, hipercolesterolemia e hipertensión. El riesgo es más bajo en los diabéticos.
• En hombres se recomienda la reparación en aquellos en donde el diámetro máximo del aneurisma es de 5,5 cm o más y en mujeres cuando el diámetro máximo es de 5 cm o más.
• La reparación endovascular de los aneurismas de aorta se asocia a un menor riesgo de complicaciones perioperatorias y muerte que la cirugía abierta.
• La ventaja inicial de la reparación endovascular se mantiene por 2 o 3 años luego del procedimiento. No existen diferencias a largo plazo en términos de muerte.
• La reparación endovascular se asocia a más re-intervenciones, en general procedimientos sencillos. A lo largo de toda la vida del paciente la cirugía abierta se asocia a más re- intervenciones debido a la laparotomía.
• Para la vigilancia estrecha, tanto la tomografía como la ecografía son adecuadas.
Esta es la información más resumida y que no tiene grandes cambios con respecto a lo que sabíamos en el último tiempo. En este sentido, los datos son tranquilizadores, ya que indican que conocemos bastante bien el genio de la enfermedad y podemos adelantarnos a la misma.
Título original: Management of Abdominal Aortic Aneurysms.
Referencia : Andres Schanzer et al. N Engl J Med 2021;385:1690-8.
DOI: 10.1056/NEJMcp2108504.